Haciendo un muñeco de nieve

Dando una vuelta por los alrededores, se encontraron a una pequeña sentada en la nieve, como si del parque de al lado de una escuela se tratara, mientras hacía un muñeco de nieve. Se miraron, sonrieron y pusieron cada una al lado de la niña.

-¿Quieres...- empezó a decir Nina sonriendo.

-...que te ayudemos?- acabó Kire sonriendo a la vez.

Las dos se quedaron esperando la respuesta de la niña.

Sonrieron las dos y se sentaron a su lado.

-¿Y bien...- le fue a preguntar Nina- ...que hace siempre una niña como tu sola?

-Que directa, chica.- dijo Kire reuniendo con las manos la nieve para que la niña hiciera su muñeco, o por lo menos lo intentara.- Nadie diria que eres mi hermana.

Siguieron reuniendo nieve para ayudarla.

Paseando entre las montañas me siento bien, el aire frío golpea mi pelo y mi cara, por suerte vengo abrigada, canturreo intentando acabar con el silencio pues los se me ha olvidado el ipod en casa, mis pisadas quedan marcadas en la nieve mientras camino admirando el hermoso paisaje, Yuuki corre algo por delante hasta que la pierdo de vista, me alarmo, la loba es mi única compañía en este lugar.

--¡¡Yuuki ¿dónde estas?!!--

El eco me devuelve la pregunta, pero no hay señales de mi mascota, camino a paso rápido hacia el último lugar donde la vi y me la encuentro algo mas adelante, lamiendo la mano de una muchacha de pelo azulado hasta la cintura, reclamando su atención.
Me acerco a las tres chicas que hay ahí, Yuuki me mira moviendo la cola y lanza una mirada a modo de saludo antes de volver a lamer la mano de la chica.

--Lo siento, se me ha escapado...-Me disculpo por el comportamiento de mi animal, la curiosidad me recomcome hasta que pregunto.---¿Y qué haceis?--

Me quito un guante para sacar un pedazo de chocolate de mi bolsillo y metérmelo en la boca, el dulce y el azúcar invaden esta, me ayudo de la mano izquierda para volver a enfundar la derecha en el guante de color negro para que no se me quede fría.

Se giraron las dos primero hacía el lobo que estaba lamiendo la mano de la niña y despues a la chica que habían visto el otro dia en el Gran Banco Negro y que ahora se acercaba andando por la nieve.

-Hola, de nuevo.- le dijo Nina sonriendo a la chica. -¿Que te trae por aqui?

-¿Disfrutando del sol?- le pregunto sonriendo igualmente Kire.

Las dos siguieron reuniendo nieve para hacer aquel intento de muñeco de nieve.

--Bueno, el sol no está mal, pero este tiempo también me gusta mucho.--

Confieso mientras sonrío a las gemelas.

--Por cierto, esta es Yuuki, mi mascota.--

La loba se acerca a las gemelas moviendo el rabo y lame sus caras alternativamente antes de tumbarse sobre la nieve del color de su pelaje.

Me siento sobre la nieve a su lado y digo.

--Pero nunca me hace demasiado caso...--

Kire, poco interesada en mascotas, siguio ayudando a la niña a acomular nieve para hercer el muñeco, aunque ella también se planteaba como conseguirían mantenerlo en pie. Mientras Nina siguio hablando con la recien llegada sobre la loba que ahora se rebolcaba en la nieve, camuflandose en ella gracias a tener el mismo color de pelaje.

-Mejor que las mascotas no nos hagan caso...-le dijo a la chica.- ...Así es más entretenido.

-Tu te refieres a las mascotas humanas- le respondio Kire sin ni siquiera girarse o dejar de acomular nieve.- A este tipo de mascotas, si no te hacen caso, te calientan la cabeza a problemas. ¿A que si, chica?- le pregunto finalmente a la recien llegada.

-No me estaba refiriendo a ese tipo de mascotas, tonta.- le contesto Nina a su gemela mientras el rubor poco común en ellas se le subia a las mejillas.