El Dragón cornamenta "Grupo 2"

*Aquí estará el grupo 2 compuesto por Balldur, Ikarus y Dragon *

Un hombre misterioso daba la información muy escueta; informaba de unos acontecimientos sucedidos en los territorios del presente en las montañas del Norte.

-En las montañas del Norte se ha avistado un dragón con una gran cornamenta, se buscan intrépidos y valerosos aventureros que se atrevan ha averiguar que es lo que sucede realmente.

*En aquel momento paso un grupo de personas todas vestidas de negro que portaban varios ataudes y una pequeña camilla con un hombre moribundo con diversos agujeros de mas en el cuerpo, aquellos que miraron en otra parte del cuerpo que no estuviera tan desfigurada pudieron apreciar que se trataba de un Yan debido a los rasgos de dragón que tenia balbuceaba palabras que no se lograban entender debido al dolor y la falta de coherencia de sus palabras.
El hombre trago saliva y prosiguió con su mensaje*

-Como podéis comprobar el asunto es grave, este es el ultimo grupo de aventureros que se atrevió a marchar, llamo a aquellos valientes aventureros que se atrevan a ir, las dificultades son numerosas y el peligro aun mayor, como habeis visto pocos sobreviven, y aquellos que lo hacen no están en un estado mental ni físico de los que se espere una recuperación.

Unas personas se acercaron entre la que estáis vosotros a cada uno le dio un pequeño sobre con una carta; en el interior de esta se encontraba la situación del lugar donde se encuentra el informador, el cual terminaría de acordar el pago y explicaría los detalles de la misión y los datos que se conocen sobre la ubicación de este dragón.

Vuestro grupo compuesto por diez personas marchasteis hacia vuestro destino que se encontraba a varios días de distancia, siguiendo el pequeño plano que había en la carta os adentrasteis el bosque por un sendero que se hallaba oculto entre la maleza, hubo diversas dificultades, ya que estaba descuidado en algunos trozos era difícil proseguir con la espesa maleza el camino se apreciaba mas bien por los cortes que se veían en ella.

Os hayáis ahora en una pequeña posada que esta situada en un claro, ciertamente era la ubicación que se indicaba en el plano, pero desgraciadamente por el camino algunos de los miembros se perdieron y otros fallecieron por ataques de diversos animales del bosque. Ahora tan solo quedáis tres de los diez que empezasteis esta expedición.

*Off ahora tenéis un poco de roleo libre*

Me encontraba exhausto del día tan agotador que habíamos tenido. Aquel fue un mal día para todos, pero sobre todo para los compañeros que perdimos, todos ellos grandes aventureros. Recordaba sus muertes con total claridad y como por esas alimañas habían muerto a traición, pero podría alegrarme, había sufrido muchas heridas pero seguía con vida, al igual que otros dos compañeros... Pero que son dos compañeros al haber partido diez...

Ese comienzo era muy malo y a pesar de que quisiera ser optimista no podía serlo, aunque en realidad me fije que mis dos compañeros eran fuertes, ya que entre los dos me habían salvado de un bicho gigante que apunto estuvo de matarme. Sabía poco de ellos, solo sus nombres y poco más, tantos ataques dejaron poco tiempo a las presentaciones.

Me sentía demasiado cansado y por fin llegamos a un claro y pude observar que era el sitio que señalaba el plano.

Iba delante avanzaba torpemente cuando vi que en el centro del claro había una pequeña posada, por fuera se veía acogedora así que me relajé un poco y guardé mis armas en sus ranuras de los brazos y comenté a mis compañeros:

-Parece que este es el lugar...

Me giré y al mirarlo vi que ellos estaban heridos como yo y también se les veía cansado.
Era una posada pequeña, estaba hecha de madera pero tenía una rara aura que la rodeaba. De la chimenea salía humo y en ese momento empezaban a encender las luces en el interior ya que se estaba haciendo de noche.

-Apresurémonos que la noche se acerca.

Dije dirigiéndo mi de nuevo hacia la posada y esperando a que ellos avanzaran.

Había partido en esta aventura hace un tiempo, al inicio eramos sobre unas 10 personas pero ellas murieron pasado un tiempo, me daba lástima no haberlos matado yo pero aún quedaban dos personas en pié. Había estado ayudando mucho a una de esas personas, un licantropo que parecía muy amistoso, como él se empeñaba en ayudar al otro hombre tenía que hacerlo. Solo intentaba ganarme su confianza y ayudarlo a sobrevivir para poder matarlo yo mismo, aunque cada vez que me acercaba mucho al licantropo un enorme impulso asesino me saltaba pero era demasiado fuerte para que unos impulsos así me descontrolaran. Aparte también quería volverme más fuerte para poder asesinar a esas demás razas inferiores.

-Argh... Estas heridas molestan mucho.

Comenté mientras veía mis heridas que aunque fuera un vampiro tardaban en regenerarse. Los otros dos del grupo también estaban bastante heridos. Estaba con unos ropajes oscuros que no dejasen pasar la luz que aún entraba por la ventana ya que era bastante peligroso para mí que el sol tocase mi piel. Había ayudado a estos hombres pero no sabía aún sus nombres, si quería sobrevivir hasta el final de esta expedición tenía que dejarlos vivir por el momento y después ya podría cumplir mis planes. Para poder estar más unidos y sobrevivir mejor en compañía tenía que saber más cosas de ellos. Uno saltaba a la vista que era un humano del futuro y el otro se olía que era un licantropo a bastante distancia.

-Bueno, tendremos que conocernos ya que somos los únicos supervivientes de esta expedición. Empezaré por presentarme yo... Soy Dragon Shishio y vengo en busca de riquezas, poder y sabiduría en esta expedición. Bueno como os llamáis?

Después de preguntar me senté en una silla que estaba pegada en la pared y era la zona más oscura de la sala, allí esperaría la respuesta de los dos hombres aunque si no respondían la verdad no me importaría mucho ya que estaba aguantando todo el odio natural hacia los licantropos y todo mi odio hacia lo demás.